martes, 19 de febrero de 2013

Mi Trinidad Literaria

 
Llevo bastante tiempo meditando cuál sería mi Trinidad Literaria, es decir, los tres libros que más me han impresionado, hechizado y marcado a lo largo de mi corta vida. Podría saliros con sagas archiconocidas como las que probablemente tendréis en mente ahora mismo, pero no creo que esa sea la idea de la entrada. Estas tres novelas son poco conocidas y dos de ellas ni siguiera tienen planes para publicar su segunda parte, sin embargo, marcaron un antes y un después en mi vida. No del tipo "he leído Crepúsculo y ahora cuando cierro los ojos sólo sueño que un yogurín engominado me chupa la sangre", ni "nunca me había identificado tanto con un personaje como con Katniss en LJDH"... Es algo psicológico, ¿nunca os ha ocurrido que la simple lectura de un libro hace que veáis el mundo de otra manera? ¿Hace que cambiéis? Pues éstos lo han conseguido, cada uno a su manera.
 

 
 
 
Prometo ir subiendo las reseñas tan pronto como pueda, alternadas con las que se me vayan ocurriendo, pero lo haré. Creo que incumplo el propósito de un blog literario si nace, vive y muere sin que haya plasmado sobre sus páginas virtuales mi Trinidad Literaria.
 
Os propongo una cosa: si queréis conocerme mejor, debéis leeros esos tres libros. Y cuando terminéis, a lo mejor os descubrís conociéndoos mejor a vosotros mismos.
 
 





 


sábado, 16 de febrero de 2013

La Desesperación de Esperanza


Tengo un proyecto y, esa simple certeza, me hace sentir vivo. Hay quién nunca entenderá la sensación de tener algo entre manos, de no dedicar ni un minuto de tu tiempo hasta que lo terminas y, entonces, sólo entonces, te permites relajarte y contemplar tu obra. Me compadezco de esas personas aunque haya quién diga que no soy capaz de albergar compasión en mi corazón; pero, fíjate, lo que las lágrimas de un niño recién huérfano no consiguen, la imagen de una vida sin vivir, sin una meta que ver cumplida, sí lo consigue. Es irónico. Ahora que lo pienso, también hay quién dice de mí que amo la ironía; no es de extrañar, sin embargo, ya que todo el mundo habla de mí. Aunque crean hablar de un qué y no de un quién. Pobres tontos; prefieren pensar que les controla un ser inerte que uno vivo, a pesar de que, por lo menos en mi opinión, no haya nada más ridículo que ser el esclavo de un concepto inanimado.

 
 
Suspiro mientras trato de acomodarme mejor en mi trono, aun a sabiendas de que, por falta de movimiento, me he quedado pegado a él. En eso consiste mi mundo: una habitación cerrada, una silla y un mapa en el suelo. Suficiente. Hago girar unas monedas relucientes entre mis dedos a toda velocidad, hasta que se vuelven invisibles al ojo humano, y luego las dejo caer sobre mis pies, en un pequeño punto del mapa llamado en honor a la reina mitológica de Creta, si no recuerdo mal. Antiguamente, cuando todavía podía levantarme de mi trono, dejaba caer las monedas de forma… digamos más equitativa. Por aquel entonces yo todavía era un joven inocente y con ansias de construir, que creía en las cualidades morales por encima de todo. Tanto es así, que me pasaba meses repartiendo mis dones lo más justamente posible entre todos los minúsculos puntos del mapa, fijándome en cada minúsculo hombre que lo habitaba, llegando incluso a dañarme la vista. Como digo, era joven e inocente.
 


Sin embargo, junto a mi vecina Esperanza contemplé con horror como, en muy poco tiempo, algunos hombres se apoderaban de lo que yo les había legado a otros, enriqueciéndose a su costa. Pasados unos siglos, ya no se podía hablar de hombres ricos y hombres pobres, sino de continentes. Mi carácter, envilecido por todas las atrocidades que había contemplado, se fue agriando pese a los esfuerzos de Esperanza, que aún creía en el hombre. Ella fue quien inspiró, desde la sombra, la invención de este cantico del que sólo recuerdo una estrofa:



Porque sus manos torpes y mortales
saben acariciar una mejilla,
tocar el violín, mover la pluma,
coger un pajarillo sin que muera,
creo en el hombre.


Nos distanciamos y mi actitud cambió; ¿o fue al revés? Da igual. El caso es que decidí que, puestos a que los hombres desoyeran mi ideal de justicia y se impusieran unos sobre otros, al menos podría disfrutar un poco. ¡Qué se han creído ellos que pueden desobedecerme! Será como jugar a uno de esos… ¿cómo los llaman? Esos juegos de estrategia que tanto les gustan a los humanos en el siglo XXI. Durante unas centurias, fue divertido; sin embargo, no me di cuenta de que aquello era como un veneno para mí, conforme corrompía al hombre me corrompía a mí mismo, como la roya de las rosas. ¿Mereció la pena? ¿Perder la inocencia, la moral y, por encima de todo, a Esperanza? Como dice aquel proverbio humano, lo hecho hecho está; pienso mientras lanzo otra moneda sobre Europa.

 
 
Sin embargo, antes de que llegue a tocar la superficie rugosa del continente, una mano gruesa la caza al vuelo y la envuelve en su puño.
-          Ya has disfrutado bastante- trona una voz que, por alguna extraña razón, me hace encogerme de miedo.- Tú, que al inicio de los tiempos recibiste el nombre de Justicia, no has hecho justicia a tu legado ni a tu misión. Quedas despojado de ese nombre; a partir de ahora, recibirás aquél que verdaderamente mereces por tus actos cobardes y manipuladores. A partir de ahora, serás Dinero.
En cuanto desaparece su presencia amenazadora, giro la cabeza hacia la puerta y entreveo la sombra de una mujer. Al momento la reconozco:
-          ¡Esperanza!
-          Ya no me llamo así, pues ni yo misma conservo la esperanza –susurra, cabizbaja.- Desde este momento, mi nombre es Desesperación.

 
 
Como podéis ver, todo el mundo habla de mí; casi se podría decir que el mundo gira en torno a mí. El dinero mueve el mundo y yo lo he llevado a la destrucción. Esa es mi obra, mejor dicho, mi anti-obra maestra. Sin embargo, mi pregunta es: ¿ha destruido el dinero al hombre o ha sido su propia avaricia la responsable? Lástima que ya no quede nadie con quien compartir mis opiniones, nadie salvo Desesperación; pero nunca se me ha dado bien nadar y menos en un charco de lágrimas. Vuelvo a hacer girar las monedas, de todos los países, épocas y metales, entre los dedos a toda velocidad; tal y como llevo haciendo desde hace 4.000 años y continuaré haciendo eternamente. Si lo pienso detenidamente, no sé cuánto tiempo ha pasado desde aquello. Puede que entre un pensamiento y otro hayan transcurrido siglos, o tan sólo un instante.
 
 

¿Qué os ha parecido el relato? ¿Os ha gustado?
Recomiendo leer dos veces para ver como las cosas cobran sentido al inicio una vez desvelado el misterio J
 
 
 

 

viernes, 15 de febrero de 2013

Fallo del Concurso LULYCUP

 
Un día después de San Valentín, con la addrenalina bajando como las burbujas en una birra, ¡os traigo el ganador del Concurso LULYCUP! ¿Tenéis ganas de saber quién se llevará a su casa el premio doble, libro y perla? Pues en un momento lo sabréis. Como siempre, el sorteo lo he realizado mediante Random.org, adjudicando a cada participante una papeleta por cada punto obtenido, con un total de 171 papeletas. NO voy a subir la lista de participantes y sus puntos, me parece un poco absurdo, pero si alguien quiere saber cuántas le caían a él, basta con que me mande un correo a libroriginal@gmail.com y yo le contestaré tan pronto como pueda.
 
Sin más preámbulos, vamos con el ganador o, en este caso, con la ganadora:



 

Marilú Cuentalibros
 
Como sabéis, Marilú es una bloggera fantástica y una gran persona, así que cuando vi aparecer su número en la aplicación de Random, en parte me alegré por darle el premio a una persona que lleva a mi lado en el blog casi desde el principio. Sin embargo, al acordarme de todos los participantes igualmente maravillosos, me dio un poco de pena. Gracias a Ithil, Mere, Igone, Estefanía, Elenusqui, Mara Olvier, Hoy no me Libro, Flashia, Lucanor Meatens y Beni Trujillo por darle una oportunidad a mi idea y demostrarme que siempre hay alguien dispuesto a tomar tu propuesta y decir ¡sí! Un beso a todos, a los antiguos y fieles (asiduos y menos asiduos) y a los nuevos que espero conocer mejor.
 
Gracias a todos por vuestra participación y, sobre todo, por vuestra amistad J

 

*Tienes 72 horas para reclamar el premio por correo electrónico a

 
 
 
 
 
 
 

jueves, 14 de febrero de 2013

La Soledad de Cupido





Feliz Día de los Enamorados, ojalá paséis un día genial con vuestras parejas, os atreváis a declararos o que se atrevan con vosotros; y si no estáis enamorados, no desesperéis, pues es mejor no tener nada que tener algo dañino o falso. 



Y no lo olvidéis: ¡El amor está a la vuelta de la esquina!








 
 
 

sábado, 9 de febrero de 2013

Recordatorio CONCURSO LULYCUP (Lee Un Libro y Cultiva Una Perla)


Sólo quedan un par de días para que acabe el plazo del CONCURSO LULYCUP y quería hacer un llamamiento a los rezagados, no por ello menos importantes. Aviso que llevamos 8 participaciones, de forma que, si os apuntáis, tendréis más de un 10% de probabilidades de haceros con el premio ^^

Ese premio, como supongo que ya sabréis, consta de dos partes: The Pearl de John Steinbeck y una perla cultivada dentro de su concha, esperando para ser abierta. La perla puede ser de varios colores, cada uno de los cuales representa un don (amor, salud, éxito,...) que va a abundar en vuestra vida. ¿No sentís curiosidad?

Pues sólo os queda pasaros por la entrada del concurso y ¡dejarme vuestra participación!








miércoles, 6 de febrero de 2013

Hansel y Gretel: cazadores de brujas, demonios y dragones



Últimanente los clásicos se están poniendo las botas y Hansel y Gretel no van a ser menos. Tienen un libro, Una Sonrisa Roja como la Sangre, que probablemente conoceréis; y pronto tendrá película: Hansel y Gretel: Cazadores de Brujas. Bueno, pues echémosles un vistazo a ambos:


 
 
 
 
 
 
Una Sonrisa Roja como la Sangre

 
¿Quién dijo que los cuentos de hadas son aburridos? Adam Gidwizt nos da la oportunidad de creer de nuevo en la magia, en la magia... y en la sangre. Como dice el prólogo, este no es un libro que leer a los niños a pesar de ser un re-make del famoso cuento de los Hermanos Grimm. Sí, es verdad que sus protagonistas no son otros que Hansel y Gretel, y aparecen todo tipo de criaturas mágicas tales como brujas, magos, hombres lobo..., incluso el Diablo. Pero, repito, la historia de Adam Gidwitz no está dirigida a un público infantil ya que tiene muchas escenas violentas que (aunque son contadas de forma cómica y no se recrea en el acto en sí mismo) no lo recomendaría a niños por debajo de los doce años.

Hansel y Gretel son dos hermanos valientes, poco impresionables y siempre dispuestos a hacer el bien. Lo de poco impresionables es una de las cualidades que más gracia me ha hecho, en el libro les ocurren todo tipo de extrañas situaciones ante las que ni se inmutan. ¿Es normal que todo el mundo intente matarte? Pues para ellos es el pan de cada día :)
 
Sin embargo, realmente he disfrutado este libro. ¿Por qué? No lo sé. Tal vez porque ha resultado muy diferente a lo que esperaba de él. Y yo siempre estoy dispuesta a que me sorprendan, ¿no son los mejores libros? En resumidas cuentas: no sé si te te gustará el libro, ¡pero estoy segura de que te sorprenderá!
 
 
 
 
 
 
¿Qué os ha parecido la película?
¿Le tenéis ganas? ¿Habéis leído el libro?
 
 
 
 
 
 
 
 
 



lunes, 4 de febrero de 2013

DEBATE #1 Seguidores, ¿un criterio fiable?

Hace tiempo que quiero presentaros una reflexión sobre el por qué de todo lo que un blog literario supone, como el título de la entrada indica. Antes que nada, me gustaría aclarar que se trata de un simple pensamiento en voz alta, no lleva dobles sentidos ni alusiones a nadie en concreto. Supongo que un blog está para eso, para expresar tu opinión sobre cualquier cosa sin ofender; y es lo que voy a hacer ahora. Por ser una de las primeras cosas que nos planteamos al crear el blog, he elegido como primer tema de debate: LOS SEGUIDORES.




Antes de crear el blog, yo estaba al tanto de las noticicias literarias en los blogs más reconocidos, a los que yo tenía en un pedestal. Sin embargo, siempre me preguntaba como era posible que, teniendo más de 3.000 seguidores, no les comentaran más de tres. Porque es que, estadísticamente, es tremendamente improbable (1 probabilidad entre 100) que tal caso ocurra. Y había más: ¿cómo era posible que, con sólo tres comentarios, no se molestaran en responderte?


En ese momento no lo comprendí; lo tenía todo demasiado idealizado. Egocentrismo, prepotencia... quién sabe. A lo mejor simplemente indiferencia. Pero a mí me dolió descubrir que, por mucho que lo parezca, la blogosfera no es un espacio altruísta y desinteresado, sino al contrario. Todos tenemos una meta, ya sea llegar a los 1000 seguidores o encontrar diez libros cada semana en tu buzón. Otros nos proponemos retos más sencillos, tal vez centrados en la idea de que te lean y dén su opinión; como podría ser tener más de 30 comentarios por entrada.Y no importa lo que se interponga en tu camino, lucharás por alcanzar tu meta. Así nos encontramos con seguidores fantasma, de estos que aparecen de la noche a la mañana y de la misma forma desaparecen, sin que te dés cuenta. También nos topamos con blogs sin calidad ninguna, a veces con menos de un mes de vida, que ya suman una cantidad de seguidores comparable a la de los blogs reconocidos, muchos de ellos víctimas de la treta de te-sigo-te-dejo-de-seguir, otros simplemente en simbiosis, siguiendo la ley de yo-te-sigo-y-tú-me-sigues. Todo, ¿por qué? Pues cada uno tendrá sus motivos, pero el más común es el atractivo de las colaboraciones editoriales, más concretamente los envíos editoriales, muchos de los cuales te ponen como requisito tener más de X número de seguidores. Con sinceridad, a todos nos hace ilusión llegar a casa, mirar el correo y encontrarnos un libro envuelto en plástico de burbujas en nuestro buzón. No es sólo por el placer de la lectura, es algo psicológico, el sentirte importante por un momento. No comparto esa locura, pero el sentimiento está ahí y no se puede negar.

Mi conclusión: ya no se puede usar el número de seguidores como criterio de calidad pero, como en todo, sigue habiendo grandes blogs con grandes blogueros que hacen honor cada día a su gadget de seguidores :)


Por eso os pido que penséis con sinceridad en por qué tenéis un blog, qué es lo que os lleva a mantenerlo día a día, y me gustaría que me lo contarais.




¿Estáis de acuerdo con lo que he expuesto? ¿Si no, por qué? ¿Cómo de importante es el número de seguidores para vosotros?